El culex pipiens o mosquito común es uno de los mosquitos más prolíficos del planeta. Se encuentran por todo el globo terráqueo y distintos tipos de ecosistema. Esto los hace peligrosos por las enfermedades que contagian. Aprende aquí cuáles son.
Características físicas del Culex pipiens o mosquito común
Estos mosquitos miden entre 3 y 10 mm y tienen patas negras muy largas y delgadas que los elevan del suelo. Tienen cuerpos también delgados y largos, generalmente marrones y con manchas claras en el tórax. Las hembras tienen antenas filiformes y los machos las tienen plumosas.
Se diferencian de el género de los aedes, que incluye al mosquito tigre y patas blancas, en factores específicos. En primer lugar, los aedes tienden a ser completamente negros, no marrones como el culex pipiens. Las manchas claras del culex se extienden por todo el cuerpo y patas de algunas especies de aedes, haciéndolos fáciles de identificar.
Ciclo reproductivo del mosquito común
El ciclo reproductivo del culex pipiens es similar al de otros mosquitos. Su vida se divide en 4 etapas con funciones y necesidades específicas. La primera es el huevo, que es depositado por un mosquito hembra sobre la superficie del agua en un saco. Los huevos tardarán unos días en eclosionar, dando como resultado la larva.
La larva es una criatura con cuerpo delgado, alargado y vellozo. Ella nadará en el agua estancada consumiendo restos orgánicos y algas. A pesar de ser completamente acuática necesita de aire para sobrevivir, y tiene que salir a la superficie para respirar. Esta etapa es fácilmente identificable, ya que las larvas son visibles para el ojo humano, a diferencia de los huevos.
Después de un periodo de alimentación de casi una semana, la larva pasara a su etapa de pupa. En este periodo permanecerá en el agua inmóvil y no se alimentará. Después de unos días saldrá el mosquito adulto, dejando la piel de la pupa atrás. Un mosquito adulto puede durar hasta dos semanas, y las hembras picarán para extraer sangre humana.
Hábitos alimenticios del mosquito común
Los mosquitos culex pipiens o mosquito común, contrario a lo que se cree comúnmente, no necesitan de sangre para sobrevivir. No se alimentan de ella como se alimentaría una persona de una fruta, pueden sobrevivir perfectamente sin tomar sangre. La sangre solo la necesitan por su calor y por los nutrientes que contiene para producir huevos. Solo las hembras absorben sangre, los machos no tienen la necesidad.
La dieta de los mosquitos consiste principalmente de savia de árbol y frutas fermentada. Se sienten atraídos a sustancias dulces y fermentadas, de las cuales se alimentan para subsistir. Es común verlos en masa durante el verano, debido a la abundancia de frutos naturales y de cosecha en plena madurez. Pueden alimentarse también de sustancias procesadas, como azúcar blanca.
Peligros para la salud representa el mosquito común
El culex pipiens o mosquito común es un vector biológico. Esto significa que es un agente que transmite enfermedades de un individuo a otro. El mosquito porta pero no padece la enfermedad, pues son específicamente enfermedades y virus humanos y tampoco produce la enfermedad, solo la transporta de un individuo infectado a otro por medio de su picada.
El mosquito común no transmite las enfermedades asociadas con los mosquitos, como el virus del dengue y la chikungunya. Sin embargo, sí transmite distintas enfermedades no tan conocidas pero igual de peligrosas. El control de población de este mosquito debe ser también prioridad de muchos ciudadanos, sobretodo por su longevidad.
Una de las enfermedades más peligrosas que este mosquito transmite es la filariasis humana. Esta no es un virus, con las otras enfermedades por vector del mosquito. La filariasis es un parásito que se aloja en los distintos sistemas del cuerpo y causa síntomas como engrosamiento dérmico. Es una enfermedad relativamente rara que afecta a pocas personas al año, pero no deja de ser peligrosa.
También transmite virus menos conocidos como el west nile virus y la encefalitis japonesa. Son enfermedades poco conocidas en territorios hispanohablantes pero que no dejan de ser una amenaza.
El control de población de este mosquito es un paso necesario para asegurar la sanidad de una ciudad.